Alquiler de barcos en Cala Figuera · Duromar — 4 (2019)

Isabel muy amable su compañero también

Íbamos muy ilusionados por alquilar una barca, ya que el año anterior habíamos hecho una excursión organizada por ellos, con más gente, para visitar el caló des moro y cala s'almunia y nos quedamos con ganas de pasar más tiempo en esas calas. Así que decidimos alquilar una barca nosotros dos para poder disfrutar de esas mismas calas, más tiempo. La propietaria fue muy amable en su acogida. Y la barca estaba muy bien, aunque con poca potencia, aunque eso ya lo sabíamos. El problema fue que los dos días anteriores había habido mala mar y el día que cogimos nosotros la barca, el mar no estaba en condiciones para disfrutar de nuestro día. La propietaria nos dijo que los dos días anteriores incluso habían anulado los alquileres porque no se podía disfrutar y a nosotros nos dijo que ese día sí disfrutaríamos. Ya en el puerto notamos que había cierto oleaje, pero como no somos expertos, nos fiamos de lo que nos dijo ella y de que lo disfrutaríamos. Al salir del puerto, la travesía hasta llegar al caló des moro fue muy molesta, el mar estaba bastante movido. Llegamos al caló des moro y no nos pudimos quedar. No sé disfrutaba nada ya que incluso en esa cala, que suele ser una balsa, había oleaje que no te permitía disfrutar del baño. Nos fuimos a cala s'almunia, que al estar un poco más protegida tenía menos oleaje, aunque tampoco estaba como yo lo había visto las otras veces que había estado allí. Incluso vimos que había una embarcación de la misma empresa haciendo la misma excursión que habíamos hecho el año anterior y en lugar de dejar tiempo para el baño en caló des moro, estaban haciendo el baño en Cala s'almunia (imagino que porque también vieron que en caló des moro no lo disfrutarían). Al final nos quedamos un rato en Cala s'almunia, pero al no poder disfrutarla al 100% y pensar que la travesía de vuelta volvería a ser movida, larga y pesada, decidimos volver antes y devolver la barca antes de tiempo. Incluso me llevé unos morados como recuerdo, de los golpes que me di al sujetarme, por los saltos que daba la barca por el oleaje. Fue una pena porque esas calas son el paraíso y yo hacía muchos años que tenía ganas de esa experiencia. Creo que la propietaria debía habernos avisado, ya que ella es la experta, y más cuando éramos solo una pareja. Hubo un momento en el que pensé que si pasaba algo, con el mar así, me hubiese visto en un problema porque al ser solo dos personas se hubiese complicado. Habíamos sacado el seguro de cancelación por problemas meteorológicos y creo que sinceramente, hubiese sido mejor cancelar porque no lo disfrutamos nada. La propietaria, sabiéndolo, debería habérnoslo aconsejado y habríamos podido disfrutar otro día de una jornada perfecta. La verdad, que fue una pena y nos fuimos con mal sabor de boca 🥺

Mejor imposible